El caso es un elemento indispensable para cualquier motorista, y no únicamente por ser obligatorio, ya que te puedes enfrentar a multas de tráfico si un agente de tráfico descubre que no lo llevas puesto. Esta obligatoriedad fue impuesta por una buena razón tanto a los motoristas como a sus acompañantes, porque es un elemento que permite salvar vidas, ya que minimiza el riesgo de sufrir daños graves en la cabeza en caso de accidente. Así, llevar el casco puesto reduce un 30% las posibilidades de morir en tal caso y es un 40% menos probable que sufras una lesión cerebral grave.

Ahora bien, con el tiempo, los cascos se han ido incluyendo, así mismo, como parte de la indumentaria del motorista y los distintos tipos de casco de moto se diseñan siguiendo criterios estéticos, por lo que, en la actualidad existe una amplia oferta de tipos de cascos de moto en el mercado con distinta apariencia. No obstante, ya que la seguridad es lo primero, debes saber que no todos los tipos de cascos de  moto ofrecen el mismo grado de protección en caso de accidente, ya que existen muchos modelos diferentes que ofrecen prestaciones distintas: mientras algunos tienen como prioridad la estética y resultar un complemento decorativo, otros ofrecen una protección total que puede ser vital para la supervivencia cuando se produce un accidente.

Por ello, en este artículo te vamos a explicar los distintos tipos de cascos de moto que existen para conocer el nivel de protección que ofrece cada uno de ellos dependiendo de cada caso.

Casco integral

Se trata de uno de los tipos de cascos de moto más comunes que existen debido a que son los más seguros y los que ofrecen un nivel más alto de protección en caso de accidente. Esto se debe a su propio diseño, ya que están compuestos únicamente por una pieza que no es desmontable, por lo que están completamente cerrados. Por ello, en caso de recibir un golpe intenso, tienen menos puntos de rotura, protegiendo totalmente la cabeza de golpes e impactos. Además, también protegen completamente la cara y la barbilla y su diseño es totalmente anatómico para que se adapten a la perfección y sean cómodos de llevar. Por ello, estos cascos son los más indicados para llevar siempre, ya que ofrecen el máximo nivel de protección que existe hoy en día en el mercado. No obstante, pueden ser bastante calurosos en verano y tienen la desventaja de que te los tienes que quitar cada vez que haces una parada en un viaje largo.

Casco Jet

El Casco Jet es otro de los más conocidos por ser muy cómodos y que se usan en el interior de las ciudades durante los meses de verano. Sin embargo, ofrecen un nivel de protección más bajo que los de protección integral, ya que no cubren toda la cabeza, sino la parte trasera y los laterales, que son las más sensibles de producir lesiones graves y muertes en caso de accidente. Sin embargo, la cara queda al descubierto. Únicamente en los modelos de Casco Jet que tienen pantalla, tienen un mínimo de protección en esta parte. No obstante, como hemos dicho antes, son bastante cómodos de usar en verano, ya que permite mitigar la sensación de calor dentro del casco debido a que puede traspasar el aire dentro. Por ello, son los más indicados para circular por el interior de las ciudades, pero no para ir por carreteras principales o por autovías.

Casco Modular

Es otro de los tipos de cascos para moto que ofrecen un alto nivel de protección en caso de accidente, tan sólo superados por los integrales. Son de mentón abatible, por lo que, dependiendo de la situación en la que te encuentres, así como de las condiciones meteorológicas o de temperatura, puedes convertirlo en algo parecido a un casco jet. Debes saber que no está permitido circular con el mentón abierto, sin embargo, el hecho de que sea abatible es una gran ventaja, ya que no será necesario que te quites el casco cuando realices paradas en viajes largos. Sin embargo, ya que están formados por más de una pieza, hace que tengan más puntos de rotura en caso de accidente, por lo que es más probable que se rompa si recibe un golpe bastante fuerte. Además, al incluir el mecanismo que permite abatir algunas piezas del mismo hace que sea uno de los tipos de cascos para moto más pesados que existen en el mercado.

Cascos de Off Road

Se incluyen dentro de esta categoría los cascos de trial, enduro y motocross. Algunos modelos pueden resultar similares al casco jet, pero el nivel de protección que ofrecen es bastante mayor que estos, ya que, además, incluyen una visera que ofrece un amplio campo de visión y una buena ventilación. Esto se debe a que están pensados para practicar distintos deportes o competiciones de motocross, donde la seguridad es la máxima prioridad. Aunque puedan parecer una buena opción para realizar viajes por carretera y están permitidos, te recomendamos apostar por los integrales o por los modulares, ya que ofrecen una mayor protección frente a los golpes en caso de accidente o caída.

Cascos clásicos

Se conocen como los “cascos quitamultas o cascos pasamultas” debido a que son de los tipos de cascos más inseguros que existen hoy en día en el mercado. Pese a que siguen estando homologados, la DGT lleva unos años avisando de que están pensando en prohibir su venta debido a que únicamente protegen la parte superior de la cabeza, dejando la parte trasera y los laterales completamente desprotegidos, así como la zona del mentón y de la cara. Se suelen utilizar sobre todo en verano y en el interior de las ciudades, ya que permiten el paso del viento y evitan que tengas calor. Sin embargo, en caso de accidente tan sólo sirven como complemento decorativo, ya que no serán de gran ayuda frente a los golpes en caso de caída. La alternativa más segura a estos cascos son los Jet e incluso los modulares, aunque las mejores opciones en materia de seguridad siempre van a ser los integrales.

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