A la hora de diseñar una moto uno de los aspectos a los cuales se les presta más atención es a la suspensión. Esta nos brinda estabilidad, comodidad y un mayor control del vehículo y, como es obvio, juega un papel muy importante en la seguridad y la calidad de conducción. En este artículo nos centramos en analizar la suspensión trasera de la moto y respondemos a qué tipo es mejor, si la dura o la blanda. ¡Vamos a ello!
¿Qué es la suspensión del vehículo?
La suspensión de la moto es un sistema de amortiguación diseñado para paliar irregularidades y curvas en el terreno durante la conducción. Por un lado, mejora la seguridad y, por otro, proporciona comodidad aislando a los pasajeros de las irregularidades y vibraciones. La suspensión de la moto puede ser delantera y trasera, la primera de ellas (la delantera), a su vez, puede ser telescópica normal y telescópica invertida; mientras que la suspensión trasera suele ser de brazo basculante (puede ser basculante de un solo lado o basculante doble, con dos amortiguadores).
Cómo funciona la suspensión trasera de una moto
Como indicábamos más arriba, la suspensión trasera de una moto puede contar con uno o dos amortiguadores hidráulicos. Estos tubos llenos de aceite fluyen en un pistón repleto de orificios por donde circula el fluido hasta mezclarse con gas y crear una emulsión que brinda un funcionamiento más adecuado a los amortiguadores. Es decir, el muelle amortigua las irregularidades que va absorbiendo y el sistema hidráulico frena o ralentiza la energía liberada por el muelle. Hay que tener en cuenta que la suspensión trasera puede ser, así mismo, más compleja —como la que podemos ver en las motos de competición o de gran cilindrada—. Estas últimas cuentan, también, con un amortiguador central que hace que el vehículo sea más rígido y rebote menos.
Por lo general, los elementos que pueden encontrarse en una suspensión de moto trasera son los siguientes:
- Amortiguadores traseros: individual o doble.
- Muelles: En algunos casos pueden ajustarse al peso del conductor y a las condiciones de conducción.
- Aceites y fluidos: Ayudan a absorber y disipar el calor que se genera en la compresión y rebote de los componentes.
- Sistemas de ajustes: Este sistema, disponible en algunos modelos, permite ajustar la compresión, rebote y precarga de las suspensiones. Es algo que podemos ver, por ejemplo, en modelos como la Honda Africa Adventure Sports gracias a la tecnología EERA™ SHOWA que gestiona la fuerza de amortiguación según el modo de conducción seleccionado y la precarga de la suspensión trasera, que también se puede ajustar electrónicamente.
Suspensión trasera moto: ¿Dura o blanda?
Como indicábamos más arriba, algunos modelos de motocicletas nos dan la posibilidad de ajustar las suspensiones, dependiendo de las preferencias del conductor, sus necesidades y las condiciones del terreno. Ahora bien, al hablar de si es mejor una suspensión dura o blanda, la respuesta depende, puesto que es algo muy personal. Estas son algunas situaciones en las cuales se suele optar por una regulación más blanda o más dura.
¿Cuándo usar una suspensión trasera de moto blanda?
- Lo ideal para el día a día es un punto intermedio, aunque si se ajusta es preferible un punto por debajo.
- Largos recorridos.
- Viajes en terrenos irregulares.
- Cuando se viaja con acompañante.
- Conductores de baja estatura.
Usos de la suspensión delantera de moto dura
- Uso de la moto para fines deportivos.
- Cuando se busca una mayor velocidad.
- Uso en ciudad, para salidas en semáforos y una mayor tracción.
- Conductores con sobrepeso o elevada carga de equipaje.
- Conductores de alta estatura.
Cómo regular suspensión moto
Contar con la suspensión bien ajustada y mantenida hará que la conducción resulte más segura, así como cómoda, sobre todo cuando circulas por terrenos con irregularidades. Es importante, por lo tanto, ajustar la suspensión de la moto periódicamente e inspeccionarla para obtener un rendimiento óptimo. Ahora bien, hay que tener en cuenta que la dureza de la suspensión no depende de regular el hidráulico (aunque pueda dar esta sensación), en realidad la dureza depende de los muelles (que pueden cambiarse, aunque no es lo más habitual). En cualquier caso, para regular la suspensión de la moto ten en cuenta lo siguiente:
- Mide el SAG: El SAG es el recorrido muerto de las suspensiones de la moto. Para medirlo debes comprobar cuál es el recorrido de las suspensiones totalmente extendidas. Después medir el recorrido de las motos en reposo sobre el suelo y sin piloto y, por último, el recorrido de las suspensiones de la moto sobre el suelo con piloto. Esto te permitirá determinar si debes ajustar la precarga de la suspensión de la moto o cambiar los muelles por unos más duros o blandos.
- Ajustar la precarga: La precarga es la diferencia entre la longitud libre del muelle y la longitud cuando ya está instalado el amortiguador (el amortiguador suele contar con hasta 6 puntos regulables).
- Cambia los muelles: Dependiendo de si buscas una experiencia más deportiva o más confortable y de las mediciones del SAG, puedes optar por cambiar la dureza del muelle por uno u otro modelo.
- Cambia el aceite: Cuando tu moto no permite regular el paso del fluido hidráulico al circuito, entonces puedes ajustar las suspensiones cambiando el aceite. Dependiendo de la viscosidad del mismo, esto cambiará la dureza de la suspensión.
En algunos casos, dependiendo de la motocicleta, tendrás que jugar con todos estos valores para poder encontrar el punto de dureza ideal que mejor se adapte a tus necesidades.
¿Deseas obtener más consejos e información acerca de motocicletas? No dejes de explorar nuestro blog de Honda Máquina para mantenerte al tanto de las últimas novedades de Honda. Obtén información valiosa a través de guías prácticas y recomendaciones diseñadas para entusiastas de las motos.
